A LA DE LOS REMEDIOS DE VÉLEZ



A Evaristo Guerra, un jándalo de muchos quilates
que me honra con su amistad

Tiene mi Vélez una ermita
muy bien situá, en El Cerro,
y dentro una virgencita,
evocación, ¡Los Remedios!
Tan milagrosa y bonita,
amparo de los veleños.

Una eterna primavera
te transmiten sus paredes,
color, pueblos, cielo, tierra
na más que en la ermita entres.
Un entorno sin igual,
la está orlando la Axarquía
que dentro presente está
la ilusión, el cariño, la inspiración, y la alegría
de un pintor universal,
artista de gran valía,
que ésta su tierra natal
pa los restos de la vía
la ha incrustáo y allí está.

Ese tesoro guardáo,
pero se pué disfrutá,
que Evaristo Guerra ha lográo
con su arte magistral
que te quees estaciáo
al poderlo contemplar.

Muchas gracias, Evaristo,
artista, amigo, señor,
desde "La Axarquía, Lo Nuestro" decir
que deseo lo mejor
pa los tuyos y pa ti,
que como sois mu güenos tós,
la que está en el camarín
velando está con su amor
para que puedas seguir
con tu arte e inspiración,
que el camino se hace así
ni un pasito atrás, que no.

Con un fandango campero
así voy a terminar
dedicao a los axarqueños,
a nuestra Axarquía sin par,
a la Virgen de los Remedios
y a las otras madres que están
venerás por tos los pueblos
que a todas quiero cantar.

Nadie se tié que enojá
porque Virgen solo hay una:
nuestra Madre Celestial
la más santa y la más pural
y en ella representá
cada pueblo con la suya.

Y a la que está allí en El Cerro,
en la ermita que ha pintáo
ese artista tan veleño,
reconocío por tos láos
como andaluz, malagueño
por to los cuatro costáo.
Virgencita los Remedios
Tú nunca le des de láo

Flamenco, mu malagueño,
entrañable y mu cabá,
haciendo realidad los sueños
con sus pinceles al plasmar
los paisajes axarqueños.

GONZALEZ MARÍN

Con la guitarra de Antonio de Almería,
la tiene grabá por milonga Miguel López Pozo, “El Niño de Peñarrubia


Como hombre fue un señor
un inmortal cartameño
orgulloso se sintió
ser español y malagueño.

Un artista sin igual
recitando fue el primero
y su arte incomparable
llevó por el mundo entero.

Por su virgen de los Remedios
sentía gran devoción
y consta a los cartameños
que América la llevó.

Mas nadie pudo saber
donde la tuvo guardá
y solo gracias a él
la Virgen en su ermita está.

Por eso los cartameños
lo tienen en su memoria
porque González Marín
con Cártama está en la historia.